Enfrentando nuevos
retos
Comenzó el siglo XXI y con él un futuro
previsible, el cumplimiento de un sueño que ha estado
presente en los y de todos los tiempos, pero que
por diversas circunstancias algunos no pudieron hacerlo realidad.
Se trata de La Nueva Universidad, que acoge en su seno a todos
los soñadores, a los de ayer, a los de hoy, a los que han
de venir, sin limitación de raza, sexo, ni siquiera de
edad; la que les da la libertad a de cubanos, pues como
dijera Martí: "Ser cultos es el modo de
libre".
Se siente satisfecho el protagonista de estos hechos,
Fidel, quien manifiesta su orgullo y deseo porque su pueblo
asista a esta escuela grande, que preparará a
héroes en el saber y les dará
honoríficos de profesionales.
"Todavía me parece ver venir a aquellos
uniformados de la boina roja, bajando de las con
la mochila al hombro y el quinqué de la esperanza en
mano". Esto me contó el abuelito. Hablaba de los
alfabetizadotes que un día llegaron a su casa
ofreciéndole aprender a leer y a escribir y que con mucho
gusto él acogió como si fueran sus hijos.
¡Estos sí que pasaban trabajo! Andaban por los
caminos polvorientos rompiendo sus zapatos con las piedras hasta
llegar a casa de los campesinos analfabetos.
Anduvieron por los pantanos, cruzaros ríos; de
noche los dientes crujían por el frío, en contraste
con los días, que a veces eran calurosos y molestos; pero
ahí iban, siempre a la vanguardia de su brigada, por toda
Cuba, de puerta en puerta, para que los campesinos supieran
ordenar las letras y los números. Aquello no era una
Universidad, era la alfabetización, campaña que vio
desangrarse a muchos de sus hijos al caer en manos del enemigo,
pero que cumplió con su meta y propósito, pues
hasta entonces, sólo los que tenían dinero algo de
comodidad podían ir a la escuela o cursar una carrera, sin
tener en cuenta cuánto la ansiaran.
Era gran cosa llegar a tener tan solo un sexto grado, y
se obtenía con sacrificio. ¡Quién
diría entonces que la educación llegaría a
donde está, si hace medio siglo la gente era analfabeta!
¿Y ahora? Ahora se imparten cursos de superación
integral y se les da la oportunidad a todos los hombres y mujeres
de matricular una carrera universitaria, pues en Cuba, como en
ningún otro lugar del mundo, se persuade a los
jóvenes para que se superen e incluso se les paga para que
los hagan y en los centros de trabajos se les ofertan las
diferentes especialidades; se brindan las posibilidades de nuevos
cursos, ya sean los de tiempo completo o los cursos para
trabajadores, con las modalidades de distancia asistida, o el
curso activo según las necesidades y aspiraciones. Lo
importante es que Cuba sea una Gran Universidad, que dondequiera
que se pare un cubano pueda ser identificado, además de su
carisma, por la capacidad para resolver cualquier problema, por
su inteligencia, su excelente educación y buen gusto. Todo
gracias a La Revolución, que sólo nos pide
dedicación y esmero y cuyo único pago es el de
demostrar cuán buenos profesionales somos en la
práctica. De ahí los excelentes médicos,
psicólogos, economistas, contadores, abogados, maestros,
etc.
"En términos prácticos significa la
oportunidad de crear facilidades para que todos los individuos
estudien sin límites, durante toda la vida, con la que se
propicia el disfrute personal y la utilización culta del
tiempo". Nuestro país, en los momentos actuales enfrenta
este reto, a pesar de todos los problemas financieros que
presenta, producto al férreo bloqueo que nos impone, que
ha traído la emborrona situación del período
especial; pero esto no ha impedido que en nuestro país se
promueva la idea de La Universalización.
Ha sur54gido lo que se llama La Nueva Universidad , que
se basa en la creación de Las Sedes Universitarias
Municipales, en las que están presentes diferentes
escenarios, como son: los municipios, hospitales, prisiones,
bateyes, etc. Con esta nueva creación ya el joven
campesino no tendrá que preocuparse por si tiene la mejor
ropa o zapatos para ir a estudiar a una Universidad en La capital
provincial o en otra de ellas; o la madre de tres hijos no
tendrá que poner el obstáculo de no poder dejar a
los pequeños para irse a estudiar lejos; ahora la escuela
le queda cerca y compartirá con el amigo, con el vecino,
con el compañero de trabajo, etc. El joven enfermo no se
sentirá vulnerable y lleno de miserias, para él
también existe un futuro; y el prisionero, aquel que hizo
algo muy malo, conocerá que existe una mejor parte en la
vida: la de adquirir conocimientos y ser
útiles.
Numerosos han sido los debates nacionales e
internacionales en cuanto a la idea de esta nueva universidad,
que traerá consigo un enriquecimiento cultural de las
personas, el progreso de sus conocimientos, la eliminación
de las desigualdades y la contribución al desarrollo
económico del país.
Con esta nueva oportunidad de estudio, se estará
rescatando lo que debe ser la primera prioridad de la juventud:
la preparación para la vida futura. Esta es la etapa
más decisiva del ser humano. El mañana depende de
lo que escojamos hacer hoy. Así como la
preocupación de los niños es jugar y la del
adolescente divertirse, conquistar amigos, enamorarse, las
aspiraciones de cualquier joven es estudiar hacerse un
profesional, estudiando una carrera, en la cual a veces se
veía frustrado pues generalmente eran los estudiantes del
IPVCÉ los que recibían una mejor preparación
para los exámenes de ingreso a las universidades y el
número de ingresos era ínfimo comparándolos
con el presente. La mayoría de los graduados del
preuniversitario tenían que regresar a sus casas a
estudiar un técnico medio, e insatisfechos por no haber
podido coger la carrera que ellos querían.
Al ampliarse el plan de estudio y crearse nuevas
universidades en los municipios, las posibilidades de ingresar al
nivel superior se hace más amplia, y muchos de aquellos
que en el ayer se sintieron perdidos, hoy ven renacer la
esperanza y están reviviendo su sueño en La Sede
Universitaria Municipal.
Asustados debían de estar los profesores de
antaño, por la manera dura de enfrentar este reto, pues
con esta modalidad de estudio se necesitan una gran cantidad de
profesores o personal que se encargue de la docencia.
¿Contaría el país con esta gran demanda de
graduados del pedagógico o habría que recurrir a
otras soluciones? Pero los que ya habían pensado en el
proyecto tenían la solución del problema. Se
contratarían a los graduados universitarios en las
condiciones de profesores adjuntos, luego de un proceso de
categorización.
En nuestra época tenemos mejores condiciones para
enfrentarnos a este programa educativo. Si en el ayer dio
resultado ¡Cuánto más esperamos hoy! Los
profesionales cubanos tienen un gran privilegio en el mundo, pues
La Universidad gradúa a personas realmente preparadas para
su profesión y con gran capacidad para el estudio y la
superación. Ya no se trata de tener que pagar los
estudios, sino de tener vocación en la carrera.
En los últimos años se ha incluido la
asignatura de Pedagogía en el plan de estudio, la cual el
estudiante debe de aprobar, como cualquier otra asignatura, para
pasar el curso y se le considera igual de importante,
aportándoles el conocimiento necesario para enfrentarse
aun aula después de graduados.
Esta era la única forma de lograr tener los
suficientes profesores para enfrentar la docencia en Las Sedes
Universitarias que se crearían en la isla, pues el
número de estudiantes que matriculan no crece al mismo
ritmo que los categorizados, sino que es mayor. En estos dos
grupos es que vemos a los maestros optimistas,
carismáticos, de temple y en la esfera intelectual, de la
sabiduría que protagoniza esta obra.
Como gigantes de gran potencia salieron estos los
maestros al campo de batalla, preparados para ganarles a los
pesimistas. Se enfrentan a un nuevo modelo educacional, pero
indispensable es sacar todas las armas y utilizar la mente, la
capacidad intelectual, la inteligencia, donde los nuevos roles
del profesor universitario se enmarcan en el proceso de docencia,
investigación científica y extensión
universitaria.
Las universidades han sido siempre instituciones
totalmente centradas en el conocimiento y su gestión
constituye una oportunidad y una necesidad de alta
responsabilidad para los formadores. La presencia de La
Universidad en cada municipio le demostrado al país que
cuenta con una fuerza altamente calificada; que es posible
utilizar su potencial en función de la educación y
de la elevación cultural de nuestros
estudiantes.
Resulta importante que todas las sedes municipales se
esmeren en sus actividades docentes y las pongan en
función de proyectos específicos, que se tracen
dentro de sus objetivos de trabajo la formación
postgraduada. El profesor de la SUM (Sede Universitaria
Municipal) debe ser un verdadero orientador de aprendizaje, que
su trabajo pueda motivar, infundir optimismo y esperanza en los
estudiantes.
En el caso del profesor adjunto se sabe de lo
difícil que puede resultarle enfrentarse a un aula, pues
se trata de realizar una tarea para la cual no fue preparado en
el pregrado; pero La Revolución confía en la
calidad de los profesionales que ha formado y así lo ha
demostrado en la actividad, en la competencia y en los retos que
se ha propuesto.
La existencia de La SUM plantea que debe de analizarse
la experiencia de los profesores y adaptarlas al nuevo modelo
educativo, y a partir de ahora, formar docentes que sean capaces
de enseñar, pensando en el futuro, pues cada graduado de
de ser integral en todos los aspectos y preparados para cualquier
misión.
Esta tarea ha de realizarse hoy, en el aula, en el
intercambio tutor- tutoreado, en la vida diaria. Han de trazarse
estrategias de aprendizaje, según las necesidades
individuales, para lograr graduar profesionales verdaderamente
capacitados en su función. La base está en algunos
de sus componentes fundamentales durante su etapa de
estudio.
Desarróllense clases brillantes, ya sean
conferencias, clases teórico- prácticas,
seminarios, clases prácticas, encuentros, prácticas
en el laboratorio, etc., con sus debidos requisitos, y no dejen
de realizarse las consultas para la aclaración de dudas.
Se debe de incentivar al estudio independiente, así como
al uso de los servicios de información científico-
técnica, al uso de la bibliografía de consulta,
entre otros. Se confirma la necesidad de la búsqueda de
niveles de pertenencia y excelencia académica, así
como la mejora continua.
Otra tarea importante que desarrolla el profesor
universitario es el de la investigación científica,
esto es lo que genera el conocimiento de las universidades. La
gestión de este conocimiento promueve el desarrollo
sostenible y humano.
Al llevarse La Universidad a los propios municipios
propicia la posibilidad de que se realicen las investigaciones en
el propio territorio, ya sea por los profesionales o por los
mismos estudiantes. De este modo se le dará una
rápida respuesta a los problemas que se presentan en los
mismos; así como que se incrementará el grado de
responsabilidad y pertenencia en los investigadores.
El compromiso está en toda la población;
todavía falta mucho por hacer. De esta forma los
municipios además de utilizar los recursos Humanos para su
desarrollo podrá resolver los problemas que presenta con
naturaleza científica y que sólo con las
investigaciones podrán ser resueltos.
Con la investigación se abrirá la mente a
los estudiantes y conocerán de los problemas que nos
asedian, aprendiendo a buscarles solución. Esta tarea les
ayuda a mirar desde el fondo, desde adentro, y capacita a la
utilidad de la virtud. El investigador es el que realmente tiene
derecho a aprender y a saber de dónde vienen las cosas y
por qué ocurren los fenómenos. Es el profesor el
que debe de motivar a sus alumnos hacia este mundo nuevo. Debe de
tratar temas interesantes y permitirles realizar conclusiones al
respecto.
Quiere decir, que en la formación de
profesionales, la investigación científica y la
extensión deben ser consideradas como funciones de la
Educación Superior. La Universidad siempre se ha vinculado
con todas las tareas locales y las que prepara el centro; hoy no
ha de ser una excepción.
Fueron los jóvenes universitarios los
protagonistas de nuestra historia, los que siempre estuvieron a
la vanguardia. De ella salieron los héroes, los
intelectuales y científicos que tratan de arreglar y
descubrir lo más escondido del Universo.
Ha de verse a cada universitario en los actos
políticos, en cada manifestación, en cada
movilización estudiantil u obrera. Estamos formando
capital Humano que como expone nuestro Comandante: "Implica no
solo conocimientos, sino también y muy esencialmente:
conciencia, ética, solidaridad, sentimientos
verdaderamente humanos y espíritu de sacrificio,
heroísmo y la capacidad de hacer mucho con muy
poco".
Con la creación de La Sede Universitaria
Municipal hemos revivido además la experiencia de la
figura del tutor, el cual juega un papel protagónico en
este proceso. Antes se entendía como tutor sólo a
la persona que te guiaba y orientaba durante la confección
de la tesis de grado y otros trabajos investigativos; pero hoy,
la idea de tutor está más generalizada.
Cada estudiante al matricular en este nuevo modelo
educacional tendrá a una persona responsable de orientarlo
y ayudarlo en todos los años que dure su carrera. Se
preocupará por sus problemas académicos, personales
y sociales, con la obligación de ayudarlo en cuanto
necesite. Son múltiples las funciones que debe de realizar
el tutor de La SUM, que de desempeñarlas correctamente
influirá positivamente en el estudiante, el cual se
sentirá más seguro y optimista.
El tutor debe de caracterizar y diagnosticar al
estudiante en las diferentes dimensiones, de esta forma
podrá llevar a cabo su función educativa. Es el
encargado de elaborar y aplicar acciones que los eduque
individualmente, lo cual incluye: Asesoría en los aspectos
académicos generales, organización del tiempo para
su estudio, ayuda para hacer cuadros, tablas, gráficas,
trabajos investigativos, etc.; los incentiva a participar en las
jornadas científicas que programe el centro. Está
al tanto de la asistencia y puntualidad de sus alumnos a clase y
en caso de que hayan tenido ausencias se preocupa por las causas,
ayudándoles en sus problemas. Conoce de su
participación en actos políticos y actividades de
extensión universitaria convocadas por la FEU o la
sección de base a la que pertenecen.
El tutor enseña a sus estudiantes a cómo
actuar mejor ante las diversas situaciones, a tener nuevas
perspectivas, a formar valores y principios. Se vincula con sus
familiares, docentes, para tener una mejor coordinación de
sus funciones. Comparte sus conocimientos y experiencias,
convirtiéndose en refugio para el alumno. Tiene la
capacidad de aclarar sus dudas y actuar con sabiduría en
todos los casos.
El proceso totoral se concibe como una ayuda
pedagógica para la formación profesional del
estudiante en la universalización. Generalmente el tutor
atiende hasta cinco estudiantes de los cuales debe de ser
guía, ejemplo, debe de desarrollar un trabajo creador y
dar de sí todo el esmero y atención que cada alumno
requiere; atendiendo cada problema de forma individual y ser
puente de enlace entre la Universidad y ellos.
El tutor debe de entregar todo su esmero y alma en la
labor que realiza. Viene a convertirse de maestro a
psicólogo, consejero, amigo, cuando comparte con su
tutelado cada etapa de su vida estudiantil, y lo vemos
organizando sus ideas para ayudarlos a confeccionar sus proyectos
de vida; pensando en cómo va a ser el mañana , en
cómo superar las debilidades y afrontar las amenazas que
día a día experimenta un estudiante; lo que
significa proponerse metas y llevarlas a cabo, luchar para poder
cumplirlas , lo cual se logra con la planificación de
tareas, que un ana vez terminadas, puede darse en el pecho y
exclamar alegre que ya ha subido un escalón , por lo que
son menos los que le quedan para llegar a la cúspide de la
montaña; diciéndose siempre a sí mismo que
para los deseos no hay obstáculos de piedra, ni fortalezas
que impidan avanzar al que quiere alcanzar un blanco
determinado.
La orientación de la construcción de los
proyectos de vida profesional a los estudiantes también es
tarea del tutor, para que no sean como algunos mediocres o
especuladores, sino que lleguen a estimar lo que tienen y ser
útiles. Pone todo su empeño para que sus alumnos se
sientan motivados por la carrera y que sean capaces de resolver
todas las tareas que se le orienten y aprendan a llevar la doble
obligación de de trabajador y estudiante. Se pone
él como ejemplo, de forma tal que inspire seguridad y
confianza.
Parece ser una tarea simple, pero hay que recordar que
el tutor también es un individuo involucrado con un centro
de trabajo, con el cual debe de cumplir horarios, tareas y
reglamentos. En muchos casos representa además a una
familia con la cual tiene obligaciones, deberes, y que requiere
de tiempo.
El tutor, en la mayoría de los casos es este
profesor adjunto del que he venido hablando, el cual se enfrenta
a un aula; que tiene que dedicar horas de estudio para preparar
sus conferencias; que pasa noches enteras indagando en las
bibliografías para poder impartir clases enriquecedoras y
que a la vez responde a los otros deberes del contrato como son;
reuniones de carrera, reuniones de grupo, consultas, encuentros
de tutoría, cuidado de exámenes, etc.
Todo lo mencionado anteriormente, unido a las tareas del
tutor, convierte al profesional de hoy, a ese que es capaz de
responde en esta batalla de ideas, en paradigma de4l hombre de
siempre, en uno de los pinos nuevos que profetizó el
Apóstol de La Patria y en el maestro noble que
formó esta Revolución y en el cual tiene depositada
su confianza.
Es ineludible la visión de nuestro Comandante.
Ordenó enfrentarnos a esta tarea con un alto grado de
riesgo, pero el pueblo respondió a su oferta de ir a las
aulas y hoy todo está saliendo bien, de maravilla. Los
jóvenes que hace algunos días atrás andaban
por las calles mariposeando o haciendo burbujas en el aire, se
han incorporado a este plan educacional. Semanalmente los
trabajadores se ausentan a sus centros de trabajo, pero con
ausencia justificada, los encontrarás en las aulas de La
Sede Universitarias del municipio. Ni siquiera los abuelitos se
quedan en casa. Ellos también tienen sus libros y su
escuela grande.
A todas las personas que estaban desvinculadas de
estudio y que ahora son trabajadores se tiene que enfrentar el
profesor universitario. Por lo que al preparar sus conferencias
debe de pensar más de dos veces lo que va a decir y
cómo lo va a expresar, teniendo en cuenta que sus alumnos
proceden de diferentes fuentes y que a cada cual se le debe de
tratar según las características de su
personalidad. Esto no es tarea fácil, pero tampoco es
imposible de lograr.
El curso pasado, en el primer año del curso de
distancia asistida, impartiendo la asignatura de Filosofía
y Sociedad, me tropecé en el aula con estudiantes de todas
las edades, bueno, a partir de la requerida para realizar la
matrícula. Casi no lo podía creer cuando
miré para la primera mesa de la hilera de la izquierda del
local; uno de mis alumnos parecía ser el abuelito de todos
los presentes; y teniendo en cuenta su edad ¡Sí que
podía serlo!
Me llenó de inspiración sus deseos de
vivir y ansias de superación al notar la
participación brillante que tuvo en clases a pesar de sus
más de sesenta años, por lo que me puse a
reflexionar las cuestiones que hoy estoy tratando.
De igual forma, el profesor universitario, debe de darle
frente personas como estas, cuya sabiduría, por la
experiencia vivida, es mayor que la de ellos en la mayoría
de los casos y aún así debe de saber cómo
llegarle y usar determinadas estrategias; cuando a la vez tiene
en su audiencia a la jovencita de diecinueve y veinte años
de edad, o al joven que pasa de los treinta sin llegar a los
cuarenta. Todos son estudiantes de una misma aula , que comparten
las actividades de un mismo grupo. Ante estos obstáculos
que se presentan en La Nueva Universidad, como suelo llamarle, el
profesor tiene que actuar con mucha sencillez y claridad en su
expresión.
El profesor debe de logrear, por todos los medios, de
que sus estudiantes los entiendan, de otro modo, su trabajo no
cumple objetivo. Debe de transmitir con amor sus conocimientos
para que el alumno pueda captar el mensaje; tener paciencia para
aclarar las dudas que puedan presentarse y si es necesario
repetir el contenido. Ser perspicaz y sabio; mostrar respeto y
prestar atención a los que participan en la clase;
Inculcar valores e influir con ejemplo positivo; dejar
atrás sus problemas personales y concentrarse en su labor
educativa.
El profesor debe de demostrar interés en los
temas que trata y hacerlos interesantes para que gusten y puedan
ser captados. Buscar iniciativas; llevar a la clase medios de
enseñanza; salir de la monotonía; Preocuparse por
el que no participó o estuvo arrinconado al final del
aula, por el solitario o el que tiene timidez para responder a un
ejercicio. Ser amigo de sus alumnos, pero a la vez recto con la
disciplina, y el respeto; ser de una sola palabra , rectificar
los errores que comete, reconocer lo bueno y no ocultar lo mal
hecho; experimentar alegría, optimismo, seguridad; Ser
puntual y hacerse querer.
Lo que se pretende es que el claustro de profesores que
hoy están asumiendo esta tarea prioritaria de La
Revolución, en pos de La Batalla de Ideas que defendemos,
pueda tener un buen desempeño a pesar de todos los
problemas y dificultades que se presentan y que se adapten a los
nuevos retos educativos.
Ya lo planteó Fidel: " Hay que mantener a los
profesores que hoy están en nuestras aulas e incrementar
su reserva; cuidar celosamente Los Recursos Humanos
jóvenes que hemos cuidado en estos años,
enfatizando en su profesionalidad y superación; continuar
analizando las necesarias transformaciones a las que debe de ser
sometida la enseñanza técnica- profesional y el
preuniversitario; perfeccionar el proceso de
Universalización de la educación superior y lograr
que todas las universidades del país transiten a partir de
estas ideas hacia esa excelencia académica y
revolucionaria que el país demanda de sus estudiantes y
profesores universitarios.
Muchos han puesto toda su confianza en nosotros, los
estudiantes también, seamos cada día
mejores.
Autor:
Lic. Yeney Pérez Ramírez
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