 | ISRAEL Y EL MEDIO ORIENTE: ¿VIVIRÁN ESTOS HUESOS? |
Las palabras de Jesús son pertinentes a la actual situación de conflicto desatado que se vive en Medio Oriente al empezar el año:
Mateo 24:6 Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin.
"Guerras" y "rumores de guerras" oscureciendo el panorama internacional. "¿Por qué no puede haber paz?" se preguntan muchos. Es que quizá no han buscado la información correcta. La única clave que permite entender los acontecimientos es la "triple lente", el ángulo bíblico profético.
¿Qué ocurre con Israel y Jerusalén? El profeta Zacarías lo establece con asombrosa claridad...con 2.500 años de distancia:
12:1 Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, ha dicho: 12:2 He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén. 12:3 Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, bien que todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella.
Jerusalén es la "copa que hará temblar a todos los pueblos alrededor de Judá -Israel por extensión. Es llamada "piedra pesada a todos los pueblos".
Al comentar la situación actual de Israel en Medio Oriente, el especialista en Medio Oriente Daniel Pipes señala:
"Su destacado progreso a lo largo de las décadas no le ha liberado de un peligro con muchos facetas que abarca casi cada medio imaginable: armas de destrucción masiva, ataque militar convencional, terrorismo, subversión interna, bloqueo económico, asalto demográfico y sabotaje ideológico. Ningún otro estado contemporáneo se enfrenta a un abanico de amenazas así; en la práctica, probablemente ninguno lo haya hecho nunca en la historia."
Y agrega:
"Haber sobrevivido Israel a incontables amenazas a su existencia a lo largo de las seis últimas décadas, y haberlo hecho con su honor intacto, ofrece un motivo de celebración para su población. Pero la alegría no puede durar mucho, dado que tiene que volver a las trincheras a defenderse de la próxima amenaza".
¿Qué nos señala la Biblia respecto al papel gravitante de Israel en la profecía? Echemos un vistazo:
La mano de Jehovah vino sobre mí; me llevó fuera por el Espíritu de Jehovah y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos.
Me hizo pasar junto y alrededor de ellos, y he aquí que eran muchísimos sobre la superficie del valle. Y he aquí que estaban muy secos.Entonces me preguntó: —Oh hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y respondí: —Oh Señor Jehovah, tú lo sabes.Entonces me dijo: —Profetiza a estos huesos y diles: “Huesos secos, oíd la palabra de Jehovah. Así ha dicho el Señor Jehovah a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis.Pondré tendones sobre vosotros, haré subir carne sobre vosotros, os cubriré de piel y pondré espíritu en vosotros; y viviréis. Y sabréis que yo soy Jehovah.”Profeticé, pues, como se me ordenó; y mientras yo profetizaba, hubo un ruido. Y he aquí un temblor, y los huesos se juntaron, cada hueso con su hueso.Miré, y he aquí que subían sobre ellos tendones y carne, y la piel se extendió encima de ellos. Pero no había espíritu en ellos.Entonces me dijo: —Profetiza al espíritu. Profetiza, oh hijo de hombre, y di al espíritu que así ha dicho el Señor Jehovah: “Oh espíritu, ven desde los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos, para que vivan.”Profeticé como me había mandado, y el espíritu entró en ellos, y cobraron vida. Y se pusieron de pie: ¡un ejército grande en extremo!Luego me dijo: —Oh hijo de hombre, estos huesos son toda la casa de Israel. He aquí que ellos dicen: “Nuestros huesos se han secado. Se ha perdido nuestra esperanza. Somos del todo destruidos.”Por tanto, profetiza y diles que así ha dicho el Señor Jehovah: “He aquí, oh pueblo mío, yo abriré vuestros sepulcros. Os haré subir de vuestros sepulcros y os traeré a la tierra de Israel. Y sabréis que soy Jehovah, cuando yo abra vuestros sepulcros y os haga subir de vuestros sepulcros, oh pueblo mío. Pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis. Os colocaré en vuestra propia tierra, y sabréis que yo, Jehovah, lo dije y lo hice,” dice Jehovah.
¿Vivirán estos huesos?
Una de las escrituras más reveladoras y que arrojan mayor luz sobre el significado del renacimiento y regreso de Israel a su tierra la encontramos en el capítulo 37, vv. 1 al 14, del libro del profeta Ezequiel. El profeta no solo nos narra su visión sobre el valle de los huesos secos. Nos relata, además, su interpretación.
Una descripción del pueblo de Dios
Se nos revela que los huesos secos simbolizan a Israel. Esta figura representa una muerte y destrucción violentas, que fue precisamente la que sufrió Israel como nación al ser dividida, desmembrada y esparcida entre todas las naciones del mundo. Ezequiel 37:12 nos habla de estas naciones como tumbas donde los judíos se hallaban sepultados y sin ninguna identidad nacional.
La pregunta del Señor a Ezequiel "¿Vivirán estos huesos?" y la respuesta del profeta "Señor, tú lo sabes" enfatizan la imposibilidad natural de aquellos huesos para volverse a unir de nuevo. Hablando humanamente, los huesos secos -Israel- no podrían volver a vivir, pero observemos la segunda parte de esta profecía.
Una declaración de la Palabra de Dios
Cuando Dios habla lo imposible puede llegar a ser posible (Ezequiel 37:4-6). Esta enseñanza sobre el resurgimiento de Israel de entre las demás naciones y su permanencia no es la invención o el sueño utópico de una comunidad. Es una palabra profética. Y como tal, tiene que cumplirse.
Una demostración del poder de Dios
Observemos las tres etapas de la restauración de Israel:
1. Los judíos serían sacados de sus sepulcros (es decir, de entre las naciones) ver Ezequiel 37:7
2. Los judíos serían llevados a Tierra Santa (Ezequiel 37:8).
Estas dos etapas ya han tenido cumplimiento. Sin embargo, la nación incrédula que existe hoy, es una imagen del hombre que se describe en el versículo 8, unido pero sin vida espiritual.
3. Israel será convertida a Cristo Jesús y llena del Espíritu de Dios. Esta etapa será cumplida después de la Tribulación, cuando Israel como pueblo reconozca a Jesús como su Mesías (Ezequiel 37:9-10; 13-14).
Según la descripción de la restauración de Israel en esta profecía, parece que esta restauración iba a ser efectuada en etapas, paulatinamente. Todo comenzó durante la Primera Guerra Mundial, cuando los británicos estaban perdiendo la guerra y Dios usó a un científico judío, Chaim Weizmann, quien descubrió la fórmula para el TNT, cambiando así el curso de la historia. En gratitud por sus servicios, el Primer Ministro inglés, Lloyd George, ofreció a Weizmann cualquier recompensa. Este pidió la Tierra Santa como patria para el pueblo judío (vea Declaración Balford, 2 de noviembre de 1917). Así comenzó el retorno de los judíos a su tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario