Gaia y la Humanidad. Energías inseparables.

Sí, hijos míos soy Gaia, y quiero deciros que son momentos para mí de recogimiento y acción muy activa en mi interior, equilibrando mis propias energías en su regeneración, y exteriorizando la presión interna regenerada y transmutada en su necesaria limpieza de energías sutiles que tengo que liberar, siempre con mi más humilde Amor hacia la vida exterior.

Ya que en el exterior hay una energía que tiene que ajustarse a la que se está generando de cambio en mi interior, y si no coincide con ésta afinidad, provoca un desequilibrio en forma de catástrofe externa de ajustes físicos, siendo necesarios estos ajustes para su estabilidad y vida en común del interior con el exterior, como una sola manifestación de vida en unidad.

Las energías de mi interior tienen que ser iguales a las energías que la humanidad genera en el exterior, y este equilibrio lo tenemos que conseguir unidos en su manifestación, y allí donde no se consiga ese equilibrio, se manifiesta su fricción y suceso físico de ajuste, con el efecto de la necesidad de su causa.

Estamos en una total unidad, yo, Gaia, y toda la humanidad en este proceso de ascensión, y nuestras acciones tienen que ser en perfecta unidad para poder crear el nuevo cambio, no podemos ir cada uno por un camino diferentes, nuestro camino es el mismo hacia la ascensión.

Aquí estamos, generando nuestras energías individualmente cada ser humano y yo Gaia, pero esto es necesario que sea unificado por todos, para que se realice con un mismo sentido de acción a conseguir con el mismo y unido sentimiento de Amor, en esta creación consentida por todos en unidad.

Así estamos creando lo mismo, yo Gaia, con los Trabajadores de la Luz, y estos a su vez con todos los que están preparados para unirse al mismo sentido de Amor en unidad, para conseguir la ascensión de los más posibles, siempre en colaboración conmigo y la humanidad como un solo organismo.

En estos momentos, como os digo, yo estoy más dedicada a mi interior porque así es la necesidad, equilibrando todas las energías y regenerando lo que es necesario en mi interior, y después, de mi interior hacia el exterior, y vosotros mis hijos estáis haciendo exactamente lo mismo, limpiando vuestro interior, removiendo y equilibrando todos vuestros aspectos que son necesario escuchar y darle su atención debida para sanarlos, regenerarlos y ascender su estado.

Tanto yo, como vosotros, estamos en ese proceso integrado por igual, ocupándonos de nuestro interior con todo lo que es su necesidad, y llevar a su exterior ese equilibrio hacia los demás, para dar nuestra parte en armonía de los que necesitan nuestra ayuda, para seguir con toda la humanidad en este proceso que es de todos.

No estamos separados ninguno de toda la vida del Planeta, somos una unidad en toda su manifestación por igual, con su evolución constante para todo lo que existe, siendo el compromiso vuestro exponer la ayuda de unidad por encima de todo lo demás, y así, sólo así, podemos conseguir el gran cambio que ya empezamos todos juntos.

Ya sabéis los trabajadores de la Luz, que este cambio está decidido por vosotros antes de venir a esta vida, con todos los comprometidos, y es ahora cuando está en su fase final para todos por igual, teniendo unos más responsabilidad que otros por su grado de conciencia en sí mismo, y es ahí donde está vuestra responsabilidad para los demás, y para todo lo que existe en esta creación del Planeta.

Sólo quiero deciros este sentir que todos tenemos por igual, equilibrar nuestro interior con toda su transmutación necesaria, y esta energía expandirla al exterior con toda su fuerza, teniendo una consecuencia compatible o incompatible, con otras energías que tienen que unirse o crear cierta fricción de desajuste o ajuste, siendo esta la necesaria acción para conseguir el equilibrio de esta unidad sin precedentes.

Sólo de esta unidad puede la humanidad y yo Gaia, subsistir en esta nueva creación por venir inmediata, y si no es así, la unidad de unos con otros no puede existir en el mismo lugar de vida existencial para todos, con su debida separación de los incompatibles en la nueva Tierra de vida en unidad.

Separados de una parte de la humanidad para vivir en armonía, pero no separados para siempre, y en la intención de todos está para que sea en el mínimos tiempo posible, ya que la dedicación será total en su próximo proceso a realizar por todos, como Guías y guiados para conseguir su ascensión de todos los que se han quedado por ascender, siendo sólo una cuestión de un tiempo de preparación necesaria en el propio requerimiento, de la propia ascensión de todos los sistemas humanos.

Hijos míos, esta es mi aportación de hoy; deciros que estamos con la misma intención interna y externa de atención a nuestras necesidades por ascender, y después este equilibrio interno se esteriliza con su efecto de distorsión o unión, siguiendo su curso con la unidad que requiere el propio proceso de realización en los diferentes estados, interno y externo, para después conseguir la unidad necesaria para nuestra decidida ascensión.

Así es hijos míos, así es, y nuestra colaboración mutua de Luz y Amor es de total necesidad para todos nosotros.

Hijos míos, yo soy vuestra madre Gaia, y también como vuestra inseparable materia viva, que mutuamente nos necesitamos para conseguir esta ascensión más elevada.

Canalizado por Sorem
30 de Abril de 2010
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TRABAJADORES DE LA LUZ