Oh, Gran Espíritu, Nuestro Padre, cuyo aliento de vida experimentamos en todas direcciones de nuestras grandes naciones, óyenos.
Gran Espíritu, cuya voz se escucha en el silencio y en el fragor de los truenos, escucha nuestras oraciones por la Paz Mundial. Llegamos a ti como los niños de todas las grandes naciones, en amor, fe, confianza y unidad.
Padre del Cielo, tráenos cálidas lluvias de aguas purificadoras. Danos nubes revestidas de plata, y la capacidad de hacer frente a los vientos de cambio y de incertidumbre. La Madre Tierra, nos bendiga con abundante comida para alimentar a todas las naciones.
Nos dé una cosecha abundante para alimentar a aquellos que caminan en dos piernas, los que caminan en cuatro patas, los que vuelan, nadan y se arrastran. Abuelo Sol, brilla en abundancia en todas las naciones. Abuela Luna, ilumina nuestro camino en la oscuridad.
Creador de todas las grandes naciones, bendice a todas tus criaturas, incluyendo las águilas del cielo, las pequeñas hormigas, el gran oso, las majestuosas montañas, los ríos serpenteantes, los poderosos océanos, los bosques lluviosos, la arena del desierto, los fuertes árboles, los verdes valles, los peces en el mar, los pájaros en el aire, el astuto coyote y la pacífica paloma.
Bendice a los débiles, enfermos, hambrientos, solitarios y a las personas sin hogar. Bendice a los pobres y los ricos, los poderosos, al audaz y al temeroso. Danos la fuerza interior para luchar contra la negatividad y la oscuridad en la desesperación, en estos tiempos de cambio. Danos esperanza en tiempos de depresión, fe en tiempos de miedo, y un alegre y cariñoso corazón.
Danos la sanación de nuestras preocupaciones y los retos de la vida. Abre nuestros corazones y mentes para el amor, y la aceptación de todos nuestros semejantes, sin importar donde viven y a pesar de nuestras diferencias físicas.
Gran Espíritu, luz del mundo, bendice a todas las grandes naciones, y haz que tu paz y armonía reine en nuestro universo. Nosotros somos muchas ramas de UN solo árbol.
Ayúdanos a aceptar nuestra diversidad, al igual que damos la bienvenida al cambio de estaciones, y a reconocer que todos somos parte del todo. Bendícenos a medida que despertamos espiritualmente a la llamada del amor universal y el perdón. Sana, prospera, y une a todas las naciones por el poder de tu amor incondicional.
Amen
de Lily-Therese "Sacred Dove"
Traducción: Maria de los Angeles Rodeiro
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